La compañía surcoreana no conoce de descanso, y es que después del gran problema que tuvo con el Galaxy Note 7 el año pasado, realmente no es de sorprender. Ahora debe de trabajar más arduamente para recuperar la confianza de sus usuarios y la cuota del mercado.

Para empezar el año, Samsung ya se encuentra lanzando la renovación de su familia Galaxy A, y lo hace con tres equipo para llenar todos los huecos posible de la gama media: el A3, A5 y el A7, cada uno de ellos con el agregado de la resistencia al agua.

A pesar de que varios fabricantes ya hayan pasado de largo las certificaciones durante el año pasado, Samsung quiere seguir fomentando este agregado, por lo que los nuevos Galaxy A llegan con una certificación IP68, además de un cuerpo metálico y el cristal 3D que ha usado en sus dispositivos insignia (como los S7 y S7 Edge).

Galaxy A3

El primero de estos equipos es el Galaxy A3, un dispositivo de gama media con características bastante completas y apostando por un olvidado pero solicitado tamaño de pantalla: 4.7 pulgadas. La resolución (como se podría esperar) es HD y con un panel Super AMOLED.

En su interior encontramos un procesador de ocho núcleos a 1.6 GHz, memoria RAM de 2GB y 16GB de almacenamiento externo. En el apartado fotográfico tenemos una cámara trasera de 13MP y una delantera de 8MP, ambas con una apertura f/1.9. La batería se queda en 2,350mAh.

Galaxy A5

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