Hace ahora un año, la compañía Cloudflare —un gigante de Internet, poco conocido entre el gran público pese a ser un actor clave en la gestión de la infraestructura de la Red de redes— anunció que había logrado hacer frente al mayor ataque DDoS de la historia.
Durante dicho ataque, una enorme red de bots bombardeó los servidores de Cloudflare con hasta 17,2 millones de solicitudes por segundo, una cifra ciertamente desmesurada, y muy por encima de un DDoS medio. De hecho, mientras que la mayoría de los DDoS no buscan más que obstruir el ancho de banda del servidor atacado, el de agosto de 2021 fue un DDoS volumétrico, que buscaba consumir la CPU y la RAM del servidor.
10 meses después, el pasado mes de junio, Cloudflare hizo saber al mundo que había tenido éxito frenando otro ataque mucho mayor contra su propia infraestructura: 26 millones de solicitudes por segundo, con la particularidad de que esta vez se trataba de un ataque vía HTTPS (lo que encarece el ataque y dificulta mitigarlo).
En ese momento, Cloudflare volvía a coronarse como receptor y mitigador del mayor ataque DDoS hasta la fecha. Sin embargo, ahora, tan sólo dos meses más tarde, ha perdido ese trono…
En Xataka
Qué es un ataque DDoS y cómo puede afectarte
46 millones de solicitudes por segundo
…Google Cloud, el servicio de alojamiento en la nube de Google, ha informado de …