La casa que veis sobre estas líneas no es la de mis padres, pero se parece bastante: pequeña y de fácil acceso desde la calle, ya que la ventana está a poco más de un metro de altura sobre la acera. Con esta premisa, la seguridad siempre ha sido una de sus preocupaciones. Cuando hace unos días les enseñé que introduciendo su dirección en Google Maps se veía claramente la fachada con todo lujo de detalles como lo que hay en la terraza, las persianas y hasta que tenemos el coche delante de la puerta, su cara de preocupación fue evidente.
Así que tomé una determinación e hice algo que está al alcance de cualquiera pero que pocas personas hacemos: pedir a Google que desenfocara nuestra casa.A lo largo de los años he visto unas cuantas veces el coche de Google con su cámara montada captando contenido que posteriormente usará en su Street View de Maps y la verdad, me ha venido de cine en numerosas ocasiones para orientarme en una ciudad nueva, para saber cómo es el entorno de un piso que voy a alquilar o descubrir lo que rodea un alojamiento vacacional.
Curiosidad e información útil para quien vaya a estar por la zona, pero también demasiados datos para quienes tienen interés en lo ajeno: si vive alguien o si la casa parece abandonada, el nivel adquisitivo de la zona prestando atención a detalles como los coches o directamente, si hay alguna cosa de valor a la vista …