La economía circular es un modelo alternativo que busca mitigar el impacto ambiental generado por el consumismo desmedido. Por ello, promueve la reutilización de objetos, con el fin de prolongar su ciclo de vida. En el sector de la moda, una buena forma de darle una segunda vida a la ropa que ya no usamos, en lugar de desecharla, es donándola. Sin embargo, en 2023, una investigación de Greenpeace descubrió una triste realidad.
La organización ecologista quiso averiguar a dónde va a dar la ropa usada que la gente depositaba en contenedores de las calles de España, o en tiendas como Mango y Zara. Para esto colocó rastreadores GPS (Airtags y similares) en 29 prendas y monitoreó la ruta que estas seguían. Tras cuatro meses de seguimiento, los activistas observaron que solo una llegó a su destino.
Lo que revelaron los rastreadores
De acuerdo con el comunicado de Greenpeace, el destino al que llegó la única prenda que pudo tener una segunda vida fue Rumanía. Allí fue adquirida por una tienda de segunda mano que probablemente fue puesta a la venta. De las 28 restantes, la mitad siguió moviéndose dentro del territorio español, pero sin rumbo fijo. Durante el tiempo en el que los investigadores monitorearon su recorrido, ninguna fue donada a una asociación o tienda de segunda mano.
En cuanto al resto, Greenpeace observó que viajaron miles de kilómetros por países como Chile, Marruecos, Togo, Egipto, Pakistán o India. Al igual …