Si descubrió los videojuegos en los noventa, seguramente recordará con viveza esas máquinas con forma de coche que poblaban los salones arcade. Ya sabe, esos bólidos plasticosos con la pintura desconchada que llevaban incorporados marchas, pedales y un volante que era más espuma que otra cosa debido al uso. Recreativas que prometían, sobre todas las cosas, choques, derrapes y mucha (muchísima) velocidad, especialmente a ojos de los más pequeños. Y eso es precisamente lo que promete, salvando las distancias, «GRID». El último exponente de la longeva saga de carreras, que ya alcanza su cuarta edición, acaba de llegar a las tiendas y está disponible para PlayStation 4, PC y Xbox One.
Codemasters, la desarrolladora detrás de la obra, trae un título que es puro arcade. Muy divertido y con un apartado gráfico bastante cuidado. El usuario tiene a su disposición una amplia variedad de competiciones y vehículos. De estos últimos puede escoger entre más de 70. Todos con licencia, entre los que figuran Ford Mustang, Ferrari 488 GTE, Audi RS3, Subaru Imprezza, Nissan Skyline, Mini e, incluso, el Renault R26 de Fernando Alonso. El campeón de F1 ha participado en la obra como Consultor de Carreras aconsejando al estudio sobre los pasos a seguir para mejorar la experiencia del usuario. También aparece en el título.
Puro arcade
Respecto a la experiencia de juego, «GRID» no es, ni de lejos, un título que vaya a resultarle especialmente exigente a un amante del género. A ese que se compra volante y pedales al …