En el futuro, los cibercriminales tal vez puedan explotar implantes de memoria para robar, espiar, alterar o manipular recuerdos humanos. Y aunque las amenazas más radicales están a varias décadas de distancia, la tecnología esencial ya existe en forma de dispositivos para la estimulación profunda del cerebro. Los científicos están aprendiendo cómo los recuerdos se ...