La excesiva burocracia y los elevados tiempos de espera que tenemos que sufrir en nuestra administración pública tiene como "víctimas" a los propios ciudadanos. Los posibles beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital (IMV) han sido los últimos en sufrir los grandes retrasos en la Administración Pública al ver suspendidas las ayudas. Lo peor de todo es que se tratan de familias vulnerables.
Tal y como recoge ElDiario, miles de familias vieron como en el mes de enero no se abonó la correspondiente ayuda debido a una suspensión cautelar de la prestación. Esto es algo que se ha visto en todas las comunidades autónomas. Ahora exigen que se levante la suspensión para poder recibir esta ayuda económica que trata de apoyar a las familias más vulnerables de nuestro país.
La carga burocrática ha afectado al os más vulnerables de España
Para entender el por qué de esta decisión hay que saber que esta ayuda en particular tiene como requisito el hecho de justificar de manera anual la situación de vulnerabilidad. Es decir, si no se acredita esta situación de vulnerabilidad nuevamente la ayuda se anula de manera automática. El problema es que aquí se incluye el gran retraso que tiene la administración pública, y al que prácticamente estamos obligados a adaptarnos.
Los responsables de comunicar esta situación de vulnerabilidad son los servicios sociales de cada uno de los municipios donde están las familias beneficiarias del IMV. El plazo para la presentación de estos certificados que acreditaran esta situación acababa el 31 de …