Los videojuegos se han convertido en un medio increíblemente diverso que actualmente está compuesto por tantos géneros que hasta cierto punto, causan que el término empiece a perder algo de sentido. A pesar de que lo anterior seguramente se seguirá agudizando con el paso de los años, podríamos decir que algunos estilos clásicos sobrevivirán gracias a su enorme legado. Podemos estar seguros de que uno de esos serán los FPS, obras que nos han regalado varias de las experiencias más memorables de todos los tiempos y que hoy en día, se mantienen sólidos y sin planes de perder protagonismo. Como saga, Wolfenstein es uno de los grandes nombres de la industria y hoy en día vive una nueva época dorada gracias al espectacular trato que Bethesda le ha dado poniéndola en manos de MachineGames. En un par de semanas tendremos entre nosotros a Wolfenstein II: The New Colossus, secuela del fantástico Wolfenstein: The New Order que pudimos probar por un buen rato y que la verdad, nos fascinó.