Será recordado como todo un hito: científicos encontraron cómo inducir un parto virginal en una especie cuya reproducción estaba irrevocablemente vinculada al sexo. Existen especies cuya reproducción ocurre sin la intervención de un espécimen macho, lo que es conocido como partenogénesis. No obstante, hasta ahora nunca había sido posible inducir partenogénesis en especies cuya forma de reproducción es la sexual.
El animal seleccionado fue la mosca de fruta Drosophila melanogaster. Detrás de los ensayos hay una serie de investigadores de Cambridge y el artículo que ha resultado ya está publicado en la revista Current Biology.
Volvamos a clases de biología elemental de la reproducción: la mayoría de las especies necesitan de reproducción sexual, lo que implica que el óvulo de una hembra sea fertilizado por el esperma de un macho. En la partogénesis no hay fertilización del óvulo y aun así hay lugar al desarrollo de un embrión y nacimiento de un nuevo individuo. Algunos animales con partogénesis son ciertos tipos de hormigas, serpientes y estrellas de mar. En muchos casos la reproducción sexual sigue siendo la vía primaria, pero algunas especies pueden recurrir a la partogénesis cuando no hay machos disponibles.
Partenogénesis hereditaria
Esa es una de las condiciones que se replicaron para el estudio, detalló la primera autora del artículo, la doctora Alexis Sperling. "En nuestras moscas manipuladas genéticamente las hembras esperaron encontrar un macho durante la mitad de sus vidas, unos 40 días, pero luego se dieron por vencidas …