Es un hecho que las adaptaciones de videojuegos al cine y la televisión están en boga. Las series Fallout, The Last of Us, Arcane y filmes como Mortal Kombat y Five Nights at Freddy's son ejemplo de ello. Pero en los 90 esta tendencia quiso salir a la luz con proyectos muy populares y que al final, decepcionaron no solo a los fanáticos del juego, también a la industria del cine.
No podemos negar que el primer intento de llevar a la mascota de Nintendo, Mario Bros., fue lamentable. El live-action Super Mario Bros recibió tan malas críticas, que esta versión oscura y post-apocalíptica de 1993 dejó una mancha en la carrera de los directores Rocky Morton y Annabel Jankel. Para fortuna de muchos, esto cambió treinta años después.
Con una duración de una hora y 32 minutos, el equipo creativo de Illumination nos presenta a Mario y Luigi, dos hermanos que aspiran a triunfar con su propio negocio de fontanería. Sin embargo, mientras trabajan en la reparación de una gran fuga en la ciudad, se ven transportados a un mundo fantástico a través de una misteriosa tubería verde.
Esta nueva incursión de Mario en pantalla grande elevó los estándares y cautivó al público. Los espectadores sin duda quedaron encantados con esta versión animada llena de comedia, aventura y referencias al juego que le otorgaron un 95% de aprobación de la audiencia, según el sitio Rotten Tomatoes.
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