Estos tres meses de reclusión forzosa por la pandemia (y los retos planteados por la actual desescalada) han tenido muchos efectos imprevistos sobre nuestra cultura laboral, en su mayor parte relacionados con el teletrabajo.
En el caso de la entidad financiera ING, ha sido el catalizador para poner en marcha un experimento: implantar, a partir del 1 de septiembre, flexibilidad total para que sus 1400 empleados decidan si desean trabajar constantemente desde la oficina o desde casa (o bien asistir sólo algunos días a la oficina).
Un 'cambio de paradigma'
Según la empresa —que hace años que implantó el horario flexible de entrada y salida al que este plan convertiría ahora en pionera en este campo en nuestro país— llevaban tiempo trabajando en esta medida, y la situación generado por el coronavirus sólo ha servido para acelerar su puesta en marcha:
"Esta decisión se viene gestando desde el año pasado con pruebas piloto de varios equipos que han asumido diferentes modelos de teletrabajo. Después de analizar los resultados de las pruebas, ING ha elegido una opción totalmente flexible".
En Xataka
Con la llegada del teletrabajo me hicieron instalar un programa para vigilar lo que hago con mi portátil
Así, dejará totalmente en manos de cada trabajador elegir el mejor modo de conciliar tres esferas principales: "vida personal" "desarrollo profesional" y "las necesidades de los equipos de los que formamos parte".
Desde la compañía explican además que son …