La Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) acaba de comunicar que el telescopio espacial de rayos X XRISM (se pronuncia «crism») ha superado su fase de puesta en marcha y que con ello empieza su misión. Esta tiene como objetivo estudiar el universo en la gama de los rayos X, donde se producen algunos de los eventos más violentos que conocemos.
Para llevar a cabo su misión XRISM monta dos instrumentos, Resolve y Xtend.
Resolve es un espectrómetro desarrollado en colaboración entre JAXA y la NASA. Cuando un rayo X incide en el detector de 6 por 6 píxeles de Resolve, su energía provoca un minúsculo aumento de la temperatura. Al medir la energía de cada rayo X, el instrumento proporciona información sobre la fuente de ese rayo, como su composición, movimiento y estado físico.
Xtend, por su parte, ha sido desarrollado por JAXA. Gracias a él, XRISM tendrá uno de los mayores campos de visión de todos los telescopios de rayos X lanzados hasta la fecha, observando un área aproximadamente un 60% mayor que el tamaño medio aparente de la Luna llena. Las imágenes que obtenga complementarán los datos recogidos por Resolve.
Por decirlo así, Xtend sirve para detectar las fuentes de rayos X y Resolve mide su composición, como se puede ver en esta imagen compuesta:
Espectro de rayos X del remanente de supernova N132D en la Gran Nube de Magallanes – JAXA
La línea blanca muestra los resultados de Resolve, que dejan ver las líneas de emisión …