Durante esta semana se dio a conocer la primera e histórica imagen de un agujero negro en la historia de la humanidad. Hecho que jamás habría sido posible sin su protagonista.
Si bien se tiene conocimiento del fenómeno celestial desde el siglo XVIII, ningún telescopio había logrado hasta ahora observar a un agujero negro, menos aún obtener una imagen.
Nada de lo anterior hubiera sido posible sin la labor de Katie Bouman, quien desarrolló en 2016 el algoritmo llamado CHIRP, que permitió crear una imagen a partir de los cuatro petabytes de datos recopilados por ocho telescopios en el mundo, agrupados dentro del proyecto Event Horizon Telescope (EHT).La fotografía confirmó la presencia de un agujero negro en el centro de Messier 87, una galaxia masiva que habita Virgo, un cúmulo de galaxias cercano a nosotros. El agujero negro se encuentra a 55 millones de años luz de la Tierra y tiene una masa 6.500 millones de veces superior a la de nuestro Sol.
La experta en ciencias de la computación de 29 años, ayudó a crear el algoritmo con el que se originó la imagen del evento estelar. Bouman comenzó a desarrollar el algoritmo necesario para este logro cuando, en aquel entonces, se encontraba estudiando un posgrado en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT).La científica tuvo algunas palabras para su trabajo a través de una publicación que fue compartida en su página personal de Facebook: “Mirando con incredulidad cómo la primera imagen que he hecho de un agujero negro …