A principios del mes pasado, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos, la encargada de entregar los prestigiados premios Oscar, anunció cambios que se realizarán a la ceremonia de premios, buscando atraer a un mayor público.
El más polémico fue un nuevo Oscar, que se entregaría a películas populares entre el público. De inmediato, los cinéfilos y críticos (e incluso miembros de la Academia) de cine se pronunciaron en contra, por ser un premio que va en contra de todo lo que representan los Oscar.
Ahora, gracias a la presión, el mismísimo presidente de la Academia, John Bailey, lanzó un comunicado anunciando que no entregarán el premio... en la próxima entrega de los premios.
Así dice el comunicado de la Academia:
“La concesión de un nuevo premio ha producido una amplia gama de reacciones y reconocemos que necesita una mayor discusión con nuestros miembros. La Academia reconoce que poner en marcha cualquier nuevo galardón a nueve meses del comienzo del año crea un gran reto para películas que ya han sido estrenadas. Continuarán las discusiones y examinaremos y buscaremos más información para ello”, indica el comunicado.
Aparentemente, el nuevo premio molestó a muchos miembros de la Academia, que se ofendieron por no ser consultados sobre la creación de la nueva categoría. Además, se filtró que el nuevo premio se había implementado por presión de la cadena de televisión ABC, que transmite los Oscar en Estados Unidos.
La Academia no cancela el premio, pero pospone su entrada en la ceremonia hasta después de la …