A los robots humanoides también les cambia el humor. Así, Sofía, una robot humanoide diseñada por la empresa estadounidense Hanson Robotics, que anteriormente había declarado que iba "a destruir a los humanos", ahora afirma que los robots nunca podrán sustituir a las personas, pero sí se convertirán en los "amigos y ayudantes" de la humanidad.