<p>El nombre oficial de la campaña es <strong>«Piracy. It's a crime.»</strong>, pero todo el mundo la conoce como <strong>«You Wouldn't Steal a Car»</strong>. Apareció por primera vez en salas de cine y DVDs a mediados de 2004, y desde entonces, las parodias nunca se detuvieron. <em>Su fracaso fue absoluto</em>, y algunos estudios sugieren que incluso aumentó las tasas de piratería, pero hay un detalle más: <strong>La fuente utilizada en el anuncio sería producto de una clonación ilegal.</strong></p>