Arqueólogos han confirmado un evento narrado en uno de los libros del Antiguo Testamento. Se trata de la destrucción de la ciudad filistea de Gat, hogar del gigante Goliat. La caída de este territorio está narrada en 2 Reyes 12:17: "Por entonces Hazael, Rey de Aram, subió y atacó a Gat y la capturó. Luego se volvió para atacar a Jerusalén".
Mediante una técnica de detección de campos magnéticos sobre ladrillos quemados, los investigadores descubrieron que la desaparición de esta ciudad, fue producto de un gran incendio que tuvo lugar alrededor del 830 a.C. Esta investigación también arroja luz sobre el nivel de desarrollo tecnológico de los habitantes del Levante.
Magnetismo para reconstruir el pasado
El artículo sobre esta investigación fue publicado en Plos One. En este explican que los materiales pierden su magnetización al calentarse a ciertas temperaturas. Es por ello que utilizaron la desmagnetización térmica para determinar si la parte de un muro hallado en Gat fue quemada in situ y destruida por algún enemigo.
Un estudio realizado en 2011 a un muro destruido afirmaba que este se había derrumbado a lo largo de muchas décadas y no en un único suceso violento. Además, sugería que los ladrillos de barro mostraban signos de ser expuesto a altas temperaturas debido a que fueron cocidos en un horno antes de la construcción.
Sin embargo, los análisis actuales confirman que, contrario a lo que asegura el artículo de 2011, las paredes de Gat …