Dentro de menos de 48 horas vamos a tener keynote, y en ella vamos a ver una nueva gama de iPhone. Llevamos meses hablando de lo que va a ser uno de los principales cambios: los nuevos tamaños de pantalla de los terminales. Las 4,7 pulgadas de los iPhone que hasta ahora consideramos convencionales se quedarán atrás.
No es la primera vez que ocurre. Apple pasó de las 3,5 pulgadas (considerado el tamaño ideal para nuestra mano) a las 4 pulgadas del iPhone 5. Y de ahí, hacia las 4,7 pulgadas del iPhone 6 o las 5,5 del 6 Plus. Y ahora pasaremos a un tamaño mínimo de 5,8 pulgadas. Sí, hay demanda de pantallas grandes, pero los analistas también avisan de un potencial beneficio para Apple a largo plazo: sus servicios.
No es el iPhone, es lo que vas a hacer con él
Carolina Milanesi, analista de Creative Strategies, lo enfoca así: da igual que producir unos iPhone con pantallas más grandes y de más calidad salga más caro, porque Apple va a sacar los beneficios de su división de servicios. Con todo el mundo disfrutando de paneles que van a tener un tamaño mínimo de 5,8 pulgadas (más grande que un iPhone Plus) y de hasta 6,5 pulgadas, ver vídeos y jugar va a ser una experiencia mucho más buena.
Además, la analista Jennifer Chan de Kantar también nos recuerda que Apple saca más margen de beneficio con los iPhone que tienen las pantallas más grandes. En el …