Airbus, el principal contratista del rover de la misión ExoMars 2020 de la Agencia Espacial Europea, tiene todo listo para empezar a comprobar que el vehículo es capaz de sobrevivir a los rigores del lanzamiento, la llegada a Marte, y el ambiente en la superficie del planeta.
Para ello va a usar un modelo de ingeniería mecánico y térmico que es básicamente un duplicado del rover –con las cosas de comer no se juega, no vaya a ser que se rompan– que reacciona de igual forma que este ante vibraciones y cambios de temperatura.
Una primera fase de pruebas se llevará a cabo sobre un banco en el que se simularán las vibraciones asociadas con el lanzamiento en un cohete Protón, los tirones que provocarán la apertura de los paracaídas, y finalmente el contacto con la superficie de Marte.
Si el modelo sobrevive a esto le seguirán dos meses de pruebas en una cámara de vacío en la que se simularán las condiciones atmosféricas de Marte: temperaturas de hasta -120ºC y una atmósfera rica en dióxido de carbono con un 1% la presión atmosférica de la Tierra. Durante ese tiempo la cámara interna en la que el rover analizará las muestras que tome tendrá que ser capaz de mantener su temperatura entre los +20ºC y -40ºC.
Y después de esto, suponiendo de nuevo que el rover sobreviva, el modelo será trasladado a Moscú a principios de agosto para otra campaña de prueba de vibraciones, pero ya metido dentro de una …