Comprar una casa, un auto, tener hijos y jubilarse dignamente. Puede que este sea el escenario ideal, pero utópico, a futuro entre algunos jóvenes. Sin embargo, pareciera que dicha libertad financiera se percibe como un objetivo cada vez más lejano con cada nueva generación.
Y no es para menos. Crecer en medio de un complicado mercado inmobiliario, gastos básicos cada vez más caros por la inflación y salarios que no parecen estar a la altura, hacen que las estimaciones económicas se disparen. Para la Generación Z, alcanzar el éxito equivale a tener un patrimonio cercano a los 10 millones de dólares.
“Las generaciones más jóvenes están haciendo cálculos y apostando a que necesitarán más dinero para alcanzar un estado futuro de éxito financiero".
Las palabras de Rebecca Rickert, jefa de comunicaciones de Empower, dan una idea del panorama al que se enfrentan los jóvenes estadounidenses. De acuerdo con una encuesta realizada por la misma empresa, las cifras de un patrimonio aumentan comparadas con generaciones anteriores como los Gen X y Baby Boomers.
Incluso, esto mismo se refleja con las expectativas salariales, donde los Gen Z esperan percibir cerca de 587,797 dólares para considerarse exitosos. Al encontrarse en el inicio de sus carreras, y en su mayoría con salarios más bajos que las generaciones mayores, no es sorprendente que los jóvenes en la fuerza laboral sean quienes experimenten mayor ansiedad financiera.
¿El fin del sueño americano?
“La …