Friedrich Nietzsche es uno de los filósofos y pensadores más famosos del mundo. Casi 120 años después de su muerte seguimos leyendo y escuchando frases salidas de su puño y letra.
Lo que muchos desconocen es que Nietzsche fue una de las primeras personas en utilizar una máquina de escribir. Eso sí, una máquina diferente a la que tenéis en mente, puesto que la que él usó era redonda y tenía una disposición de las teclas un tanto extraña.
La máquina de escribir redonda de Nietzsche
Para ponernos en contexto tenemos que desplazarnos hasta el año 1881. En esta fecha, Nietzsche había perdido casi por completo la visión; además de padecer migrañas, vómitos, insomnio y otras dolencias.
Peter Mitterhofer, CC BY-SA
Estos problemas y su falta de visión dificultaban enormemente que el alemán pudiera seguir escribiendo; razón por la que decidió comprar una máquina de escribir que le permitiera seguir difundiendo sus ideas (menos mal que así fue).
En aquellos tiempos el dispositivo era conocido como “bola de escribir” debido a su forma. La máquina redonda, creada por Rasmus Malling-Hansen (un inventor danés), fue escogida por Nietzsche a pesar de que ya existía la famosa máquina de escribir de Remington. ¿Por qué lo hizo? ¿Qué tenía de especial esta extraña bola de escritura?
El portátil de la época
Debido a su pésima salud, Nietzsche viajaba a climas más cálidos en cuanto tenía ocasión. El carácter portátil y la ligereza de la bola de escribir de Malling-Hansen la convirtieron en la máquina de escribir perfecta para el filósofo. Algunos …