Últimamente los lanzamientos espaciales –es rara la semana en la que no hay al menos uno– están empezando a parecer rutinarios. Pero distan de serlo. Hay un montón de pasos que hay que dar correctamente para que todo salga bien. Y aún a veces en el caso de cohetes con una gran trayectoria de lanzamientos satisfactorios hay sustos.
Así que no deberíamos tomar los lanzamientos como algo que sale bien sí o sí. Y mucho menos aún cuando la carga es algo tan especial e irrepetible como el telescopio espacial James Webb (JWST por sus siglas en inglés). Por eso el todo el proceso de preparación del Ariane 5 que lo lanzará se llevará a cabo con más cuidado aún, si cabe, que cualquier otro lanzamiento.
Pero en el caso del JWST más peliagudo aún que el lanzamiento es el despliegue del telescopio una vez de camino hacia el punto de Lagrange L2 del sistema Tierra–Sol. Y es que el telescopio es tan grande que no cabe en la cofia de ninguno de los cohetes disponibles. Ni siquiera cabría en la descomunal cofia de un Starship de SpaceX pues la cofia tiene un diámetro máximo de 8 metros mientras que el Webb tiene un ancho de algo más de 14. Por eso el JWST será lanzado plegado.
Y por primera vez el personal de Northrop Grumman y la NASA lo ha colocado en la configuración de despegue siguiendo el proceso que se ve en el vídeo de arriba. Pero en …