Elon Musk es una personalidad en sí misma. Más allá de dirigir empresas muy importantes como Tesla o SpaceX, no duda en entrar en polémicas y denuncias. De hecho, hace poco amenazó a Apple con prohibir los iPhone a sus propios empleados tras la asociación con Apple Intelligence. Ahora Elon Musk ha pasado a otro asunto relacionado con la viabilidad económica de la empresa que compró hace dos años: Twitter.

Durante estos dos años en X ha habido cambios significativos, uno de los más sonados fue la desaparición de las insignias de verificación y el lanzamiento de planes de pago. Estos cambios han hecho que algunos anunciantes dejen de confiar tanto en X. Por ello, la inversión publicitaria ha ido cayendo y, como consecuencia, también los ingresos.

Elon Musk denuncia a los anunciantes por un supuesto boicot a X

Las cuentas de X no están en su mejor momento. Según informa el New York Times, los ingresos del segundo trimestre del 2024 fueron de 114 millones de dólares, una caída del 53% respecto al mismo periodo del año anterior. Si vamos incluso más atrás, en 2021, Twitter ingresó 1190 millones de dólares.

Esta caída preocupa mucho a la junta directiva de X y a Elon Musk, tanto que han decidido poner una demanda a Global Alliance for Responsible Media (GARM). Se trata de un grupo que lleva las marcas responsables del 90% del gasto publicitario mundial, con empresas tan importantes como Unilever, …