Lo que parecía solo una moda o un simple detalle estético terminó en una complicación costosa para cientos de conductores en Ciudad de México. La Secretaría de Seguridad Ciudadana, junto con la Subsecretaría de Control de Tránsito, intensificaron los operativos para detectar autos que llevan portaplacas, micas o coberturas en sus matrículas. Aunque muchos lo usan sin saberlo, este accesorio puede considerar una falta grave si dificulta la lectura de los números o la entidad emisora.

La sanción, según el Reglamento de Tránsito de CDMX, puede alcanzar los 2,262.80 pesos. Esta medida se aplica con base en el artículo 45, fracción primera, inciso B del reglamento vigente. Dicho apartado establece que las placas de circulación deben estar bien colocadas, visibles y libres de cualquier objeto que impida su correcta identificación.

El problema es que algunos accesorios, por más comunes que parezcan, alteran la visibilidad de las matrículas, ya sea por el reflejo de la luz, por cubrir parcialmente los dígitos o por modificar su aspecto con cintas, plumones o incluso materiales reflejantes. No importa si el auto es particular, de gobierno o incluso una patrulla: aparentemente la vigilancia será pareja para todos, incluso para los motociclistas.

¿Por qué esta medida se volvió prioritaria para CDMX?

Las autoridades explican que muchas veces los vehículos involucrados en delitos o infracciones graves (como exceso de velocidad, invasión de ciclovías o carriles confinados) llevan las placas alteradas o cubiertas. Al evitar que las cámaras o …