Una de las grandes ventajas de la digitalización de la administración y los trámites que realizamos en ella es precisamente poder recibir comunicaciones y responderlas. En el caso de las sanciones, tener una notificación rápidamente en nuestros dispositivos, la posibilidad de apelar o directamente, abonarla sin necesidad de tener que personarnos en una oficina, con la consecuente pérdida de tiempo (quizás pedir cita, desplazarse hasta allí, colas...). Sin embargo, los trámites online siempre tienen cierta curva de aprendizaje y están sujetos a errores que pueden complicarnos la tarea. O directamente, ponerla en cuarentena. Es lo que lleva pasando en la web de la DGT a la hora de pagar multas... al menos desde verano de 2022.
Antecedentes. Te vas a la web de la DGT y en la sección de pago de multas, procedes a abonar la sanción online a través de la pasarela (aunque también puedes hacerlo desde la app, de forma presencial y por teléfono) bien sea mediante la identificación con cl@ve o proporcionando tus datos personales (sin certificado). Como es habitual, puedes pagarla en el periodo voluntario (20 primeros días naturales desde la notificación), lo que suele traducirse en aplicar una reducción del 50%. Imagina por ejemplo que la multa es de 100 euros, pero gracias al pronto pago te beneficias de un descuento que la deja en 50 euros. Y te encuentras esto:
En la primera línea se informa del porcentaje de descuento y la cantidad …