Hace unas horas un cohete chino Larga Marcha 2C ha lanzado la sonda Einstein para el estudio de fuentes de rayos X cósmicas desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Xichang. La ha colocado, tal y como estaba previsto, en una órbita de 650 kilómetros con una inclinación de 29 grados.
La sonda Einstein es un proyecto de la Academia China de Ciencias (CAS) en colaboración con la Agencia Espacial Europea (ESA) y el Instituto Max Planck de Física Extraterrestre (MPE). Su misión es buscar objetos cósmicos variables y fenómenos transitorios que emitan rayos X.
Para ello cuenta con dos instrumentos, el Wide-field X-ray Telescope (WXT, telescopio de rayos X gran angular) y el Follow-up X-ray Telescope (FXT, Telescopio de rayos X de seguimiento). El FXT está formado por dos telescopios de rayos X tipo Wolter y es el que se ve en el centro de la ilustración. EL WXT, por su parte, es un tipo nuevo de telescopio de rayos X que toma su inspiración de los ojos de los bogavantes. Sus detectores están en los doce paneles que rodean los tubos del FXT.
El WXT tiene un gran campo de visión, de tal forma que puede observar todo el cielo en tres órbitas alrededor de la Tierra. A cambio, tiene relativamente poca resolución. Pero ahí es dónde entra el telescopio de seguimiento, que una vez detectado un objeto a explorar, lo mira con más detalle.
La ESA se encargó de dar soporte a las pruebas y calibración …