Si alguna vez has gestionado algún sitio web, lo más probable es que te hayas cruzado con cPanel, el más popular de los paneles de administración de alojamientos web, que facilita tareas básicas como crear una nueva base de datos o cuenta de e-mail, o la de configurar una tarea cron.

El problema de cPanel (o de su principal competidor, Plesk... que desde hace poco pertenecen a la misma compañía) es que se trata de una herramienta propietaria y de pago, que suele incluirse en los servicios de hosting compartido, pero no en otras como los alojamientos dedicados o los VPS. Y adquirir una licencia para instalarlo por separado puede suponer un gasto extra de entre 15 y 45 dólares al mes.

Así que, ¿qué hacer si la web que queremos poner en marcha ha de funcionar en uno de estos alojamientos sin cPanel incorporado pero, por comodidad o por falta de conocimientos, no queremos lidiar directamente con la consola del servidor cada vez que queramos realizar tareas como las antes mencionadas?

Una opción, claro, es pagar la licencia de cPanel o de Plesk... la otra es apostar por alternativas de código abierto, que nosotros mismos podremos instalar en el servidor y que nos proveerán, a grandes rasgos, de las mismas funcionalidades básicas que aquéllos.

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