La aparición de un reloj inteligente con conectividad de datos no es una idea novedosa. De confirmarse los rumores sobre el próximo Apple Watch, estaríamos a punto de ver un modelo con conexión LTE o 4G. Se trataría del primer wearable de la manzana con esta funcionalidad, aunque el honor del primer smartwatch con 3G recae en el Gear S de Samsung hace tres años.
Dicho esto, no es difícil imaginar que añadir una radio de conectividad de datos estaba en los planes de Apple desde el principio. ¿Qué ha podido impedirlo hasta ahora? Hay tres conflictos que Apple ha tenido que luchar y de los que tendría que salir victoriosa para materializar este nuevo dispositivo.
El factor más importante: autonomía
Con cada nueva generación, Apple le da una vuelta de tuerca a la eficiencia energética de los componentes del Watch. Un chip más potente, pero que también consuma menos. Una pantalla más brillante que utiliza menos energía. El sistema operativo juega su papel, algo que vimos especialmente con watchOS 3.
La inclusión de una radio LTE es otra historia puesto que se trata de un componente que requiere un suministro muy importante de batería. No hay nada como poner el iPhone en modo avión para ver aumentar su autonomía. Apple podría afrontar este problema de manera similar a como lo hace con el GPS del Apple Watch Series 2: activándolo cuando no está el iPhone cerca.
Un Apple Watch con LTE activará la conectividad celular cuando haga falta, …