Un 787 en pleno proceso de ensamblado – Boeing
A la letanía de problemas con el ensamblado del Boeing 787, que recientemente cumplía diez años en servicio, se une ahora uno nuevo. Por lo visto las uniones entre algunas piezas de las alas, fuselaje y cola –AKA todo el avión– son menos fuertes de lo debido porque durante el proceso de encolado se contaminaron con teflón.
Al parecer el problema fue detectado ya hace unos meses y en principio parecía limitado a las alas, que son ensambladas por Mitsubishi Heavy Industries en Japón. Pero desde entonces Boeing ha descubierto que se da en otros proveedores que comprometen también el fuselaje y la cola. Así que básicamente todo el avión está comprometido. Lo que no he podido averiguar es cuántos aviones pueden estar afectados por este problema.
El problema está en que durante el proceso de fabricación de las piezas en materiales compuestos estos proveedores utilizaron –yendo contra las especificaciones de Boeing– teflón para facilitar su desprendimiento de los moldes. Pero resulta que la presencia de restos de teflón durante el encolado hace que la unión entre piezas sea menos fuerte de lo deseado.
Los primeros análisis de Boeing y la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) indicaban que aún siendo uniones más débiles de lo esperado quedaban dentro de los márgenes necesarios y que eso no comprometía la seguridad del avión, aunque sí podía acortar la duración de las piezas al provocar un desgaste más fuerte del …