La mayoría de mensajes de correo electrónico fraudulento optan por la táctica de "tranquilo, somos tu banco [o entidad similar] de toda la vida, puedes confiar en este enlace que te mandamos y en el que te pedimos que introduzcas todos tus datos".
Es cierto que a veces optan por el miedo, como cuando pretenden suplantar a la Guardia Civil (ahí apuestan por el "Más te vale seguir inmediatamente nuestras instrucciones, que somos la autoridad"). Sin embargo, lo que no es tan habitual es que opten, sencillamente, por ser bordes.
Pero este es precisamente este caso difundido desde la compañía de ciberseguridad ESET: un e-mail pasivo-agresivo dirigido a un departamento comercial que recrimina al usuario por el supuesto impago de una factura pendiente desde 45 días antes…
…una estrategia intimidatoria que puede resultar efectiva en algunas personas que, sorprendidos, se cuestionen si olvidaron hacer el pago… o que atribuyan dicho impago al olvido de algún empleado o compañero de oficina.
Texto del e-mail y resultado de abrir la falsa factura (Imagen vía ESET)
En qué falla este e-mail
Sin embargo, pese a que aspectos como el lenguaje (gramática y ortografía) están mucho más cuidados de lo habitual en esta clase de estafas, hay otros elementos de este email que le restan credibilidad a poco que nos fijemos, y son aspectos relevantes en los que deberemos fijarnos en futuros e-mails sospechosos con los que tengamos que lidiar:
La firma no se corresponde …