Un reciente estudio británico sugiere que limitar drásticamente los carbohidratos, incluso sin reducir calorías, podría ofrecer beneficios metabólicos comparables al ayuno intermitente. La clave estaría en cómo el cuerpo adapta su uso de energía. Los resultados abren nuevas posibilidades para mejorar la salud metabólica sin recurrir a dietas extremas.