Varios vuelos despegaron el 1 de enero de 2020 y aterrizaron el 31 de diciembre de 2019. ¿Cómo es posible? No se trata de viajes en el tiempo sino de la dirección de la rotación de la Tierra y los husos horarios.
Varios vuelos que despegaron el 1 de enero de 2020 parece que "viajaron en el tiempo" y aterrizaron el 31 de diciembre de 2019. No es ciencia ficción, ni las aerolíneas no han descubierto cómo ir al pasado, pero los pasajeros sí que pudieron celebrar la llegada del mismo año dos veces. ¿Cómo es posible?
Sucede por dos motivos: la dirección de rotación de la Tierra y la forma en que asignamos husos horarios al planeta. Todos los vuelos en cuestión cruzaron la línea internacional de cambio de fecha, que está entre la costa de Asia y la costa oeste de Estados Unidos, a lo largo del Océano Pacífico.Si se viaja desde el este hacia Asia y se cruza dicha línea, la fecha debe adelantarse un día. Pero si sucede lo mismo en dirección contraria, la fecha deberá ser retrasada un día, esto es porque la Tierra gira en dirección de oeste a este.
Uno de los vuelos fue el NH106 de Nippon Airways, que viaja de Tokio a Los Angeles. Despegó a las 12:24 de la noche —primera celebración de los pasajeros— y aterrizó a las 16:32, por lo que tuvieron horas para desembarcar, llegar a sus hoteles, descansar y salir por la noche para volver a celebrar el …