No hay nada peor que la ansiedad de un producto que se espera con gran expectación y que finalmente se retrase tantas veces que las ganas de hacer clic y reservarlo se disparen. Sí, me refiero a los AirPods y su agónico recorrido a la campaña navideña a la que ha llegado por los pelos, por cierto. Ha sido tan elevado el hype que merece la pena detenerse un momento y reflexionar sobre la idoneidad de este producto según el perfil de usuario.Sin haber podido probarlos todavía (nuestro boss ya lo ha hecho, no te pierdas sus conclusiones), yo he ido deshojando la margarita sobre la conveniencia de hacerme con unos o no. Vaya por delante que en la actualidad estoy (casi) encantado con unos Bose QuiteComfort 35, pero la tecnología y la integración de los AirPods me están haciendo replantearme todo.
Lo mejor es, como casi siempre en estos casos, escribir en un papel los pros y contras de unos y otros para intentar salir de dudas. Evidentemente, cada usuario es un mundo y cada cual utiliza los auriculares para situaciones diferentes (música, podcasts, radio, televisión…).
Por qué sí me compraría los AirPods
Integración con el ecosistema: Puede parecer una tontería para muchos que opinarán que en unos buenos auriculares lo que se espera es una calidad de audio óptima. Sin embargo, en mi caso, son muchos años ya siendo usuario de Apple y comprendiendo que la integración con el ecosistema puede ser determinante. Hablo de Mensajes, FaceTime …