Cuando llega el verano es tiempo de piscina, playa e incluso de ir al monte a hacer ruta de senderismo, pero las temperaturas también pueden llegar a cifras insoportables. Estas además de hacernos sudar muchísimo también pueden ser peligrosas para nuestros iPhone que tienden a sobrecalentarse pudiendo provocar averías muy importantes.

Y es que los componentes de un dispositivo electrónico están preparados para funcionar en un rango de temperaturas muy concreto. El exceso por encima o por debajo de esos límites puede provocar que la batería deje de funcionar o que incluso algún chip termine fundido. Y el iPhone no es un equipo que pueda resistir a esto, haciendo que la propia Apple establezca un límite de funcionamiento de entre 0 y 35 grados Celsisus.

Además, los iPhone son dispositivos que tienen a sobrecalentarse demasiado rápido sobre todo cuando los dejamos en el sol y mucho más si los estamos usando mientras tanto. Esto hace que sea realmente importante tomar diferentes medidas para enviar que se alcancen estas temperaturas tan peligrosas.

Un método rudimentario pero eficaz: el congelador

Cada año cuando llega el calor, siempre buscamos la manera de bajar rápidamente la temperatura del iPhone para evitar precisamente que se estropee. Y en Twitter un usuarios ha explicado el método que todos podemos tener en mente para enfriar rápidamente algo: utilizar el congelador.

En este tweet explica que tras detectar que su …