Queda casi un año para que el soporte de Windows 10 finalice. Lo lógico con esa fecha tan cercana es que todo el mundo estuviera ya en Windows 11 que es la versión más actualizada de Microsoft. Pero la realidad es que los datos apuntan a que solo el 30% de los usuarios ha instalado Windows 11, tras varios meses desde su lanzamiento.

Los requisitos de Windows 11 son uno de los grandes culpables de que la gente no quiera actualizar a la última versión. Pero este es un problema realmente grave en materia de seguridad, ya que son muchas las brechas que se quedarán abiertas a partir de ese momento sin solución. Aunque hay vías para evitar tener que deshacerse del ordenador que no cumple con los requisitos.

Un sistema de invitaciones molesto que ya ha quedado en pausa

La solución que podría funcionar para hacer que los usuarios actualicen sería reducir estos requisitos mínimos. Pero la realidad es que Microsoft tiene otra forma de concienciar de la recomendación de esta actualización: avisos a pantalla completa que recuerda de los beneficios de tener instalado Windows 11.

¿Te imaginas estar trabajando o jugando con tu PC y que de repente te aparezca un aviso muy invasivo delate de tus narices? Esto precisamente es lo que ha ocurrido en estos últimos meses, con una actualización para algunos usuarios de Windows 10 y que se ha ido extendiendo a cada vez más versiones.

Esto hizo que …