En el mundo del cine existen decenas de ejemplos donde los actores y actrices deciden improvisar durante el rodaje. Secuencias como la mano cortada de DiCaprio en Django Sin cadenas, la aparición del gato en El Padrino o la famosa frase "Are you talking to me" de Robert De Niro en Taxi Driver, plasman cómo la capacidad actoral marca hitos en la historia del séptimo arte.
Otro ejemplo del que casi no se habla, es una secuencia ocurrida en la obra situada durante la Segunda Guerra Mundial, Rescatando al soldado Ryan. El filme de 1998 dirigido por Steven Spielberg se consagró como uno de los proyectos más emblemáticos del director, incluso a pesar de que uno de sus protagonistas improvisó un discurso que no le agradó a nadie.
Si has visto la película, seguro recordarás una de las escenas más icónicas. En ella, el Capitán John H. Miller y el soldado Ryan mantienen una conversación antes de enfrentarse a los nazis en el clímax de la historia. Los papeles de estos personajes están interpretados por Tom Hanks y Matt Damon, respectivamente, y este último fue quien creó por completo algunas líneas sobre la marcha.
Durante su discurso, el personaje de Damon le comparte al de Hanks un recuerdo de su infancia: él y sus hermanos, que ya han muerto en la guerra, espiaban a su hermano mayor besando a una chica en el granero durante la noche. Un pasaje que resultó acorde …