Es la gran preocupación de la era moderna, de eso no hay duda alguna. Y es que los microplásticos están en todas partes, en efecto, algo que no es demasiado bueno si atendemos a que incluso se encuentran en el agua que bebemos, también en los cuerpos de casi todo tipo de animales e incluso en nuestros cerebros, donde crece su proporción, así como en las arterias, donde se asocian a un mayor riesgo cardiovascular.En un reciente estudio dirigido por varios investigadores de la Universidad de Nuevo México y del que hemos tenido noticias gracias a Genomic Press y a los compañeros de New Atlas, nos informan ahora de que la cantidad de microplásticos adheridos a nuestros cerebros ha aumentado dramáticamente en los últimos tiempos, llegando incluso hasta el tamaño de una cuchara.Por supuesto es un problema mayúsculo, puesto que estas partículas no son degradables y a estas alturas ya empiezan a relacionarse con la demencia y otras graves enfermedades de este tipo.En menos de 10 años, la cantidad de microplásticos en nuestros órganos se ha multiplicado por 10El estudio es alarmante, puesto que en realidad es fiable al ciento por ciento al haberse analizado docenas de muestras de hígado y tejidos cerebrales post-mortem para determinar cuántas partículas no degradables de microplástico se encontraban tanto en hombres como en mujeres entre los años de 2016 y 2024.Los datos no mienten y en promedio nos hablan de 142 microgramos por gramo en las muestras de hígado analizadas en 2016, que aumentaban …