Volkswagen ha dejado claro que no tiene planes de trasladar su producción fuera de México, pese a la incertidumbre comercial en Norteamérica. Oliver Blume, CEO del Grupo Volkswagen, aseguró en la presentación de resultados anuales que la industria automotriz está altamente integrada entre México, Canadá y Estados Unidos, lo que hace inviable una relocalización apresurada. Ante los rumores sobre una posible presión del gobierno de Donald Trump para que los fabricantes trasladen sus operaciones a su territorio, el directivo subrayó que la compañía sigue comprometida con sus plantas en Puebla y otros puntos estratégicos.
La discusión se enmarca en el contexto de los aranceles del 25% que Estados Unidos podría imponer a las importaciones de automóviles y autopartes. Volkswagen, al igual que otros fabricantes, ha mantenido conversaciones con la administración estadounidense, pero no tomará decisiones hasta que haya claridad en las reglas del juego. Arno Antlitz, director financiero del grupo, reforzó este mensaje señalando que mover una fábrica no es una acción inmediata, sino un proceso que requiere años de planeación y miles de millones en inversión.
"No se puede mover una planta de coches y relocalizarla de la noche a la mañana o en un par de semanas".
Arno Antlitz, director financiero del Grupo Volkswagen.
Además, Volkswagen ha apostado por la diversificación de su producción en Norteamérica. Mientras su fábrica de Puebla se consolida como un pilar clave en la manufactura de modelos como el Golf, en Canadá la compañía está …