El primer lanzamiento de un cohete Electrón de Rocket Lab fracasó no por un fallo del cohete sino por un error en la configuración de los equipos de tierra. Así que es muy lógico que decidieran posponer 48 horas el lanzamiento del Make It Rain para hacer unas comprobaciones en estos equipos.
Pero finalmente a las 6:30, hora peninsular española, el séptimo cohete Electrón despegaba del Complejo de lanzamiento 1 de la empresa, situado en la península de Mahia en Nueva Zelanda. El lanzamiento fue según lo previsto, con lo que a los ocho minutos y 59 segundos la tercera etapa del cohete y sus cargas útiles ya estaban en órbita.
El motor de la tercera etapa se activó a los 50 minutos y 27 segundos del despegue para apagarse a los 51:11. Con esto la órbita elíptica en la que estaba se convertía en una órbita sincrónica al Sol de 450×450 kilómetros, que era en la que había que dejar los satélites que iban a bordo.
La separación de los siete satélites de la tercera etapa, a la que aún le quedaba un encendido más de su motor para modificar su órbita y reentrar en la atmósfera para no convertirse en basura espacial, se completó a los 53:26.
En total sumaban 80 kilos, de los que 57 kilos correspondían al Global 3 de BlackSky, un satélite que obtendrá imágenes de la Tierra. El resto se lo repartían dos CubeSat Prometheus-2 (2 kg cada uno) del Comando de Operaciones Especiales …