Hablar de OnePlus en estos dos últimos años implica hablar de una compañía inmersa en una clara fase de transición, que dejó atrás la filosofía de marca premium para entusiastas para pasar a ser una firma dispuesta a conquistar los espectros de la gama de entrada y gama media, aprovechando los recursos de su compañía matriz, OPPO.No todo el mundo vio con buenos ojos este movimiento. Y con razón. Tras unos excelentes OnePlus 7 Pro, 8 Pro y 9 Pro (hasta que las actualizaciones acabaron echando por tierra parte del trabajo realizado con este último), la firma liderada por Pete Lau se vio inmersa en una espiral de decisiones cuestionables en lo relativo al software y al hardware de sus dispositivos, que dejaban claro que OnePlus ya no es lo que un día fue.Llegados a 2022, con una situación algo más estabilizada tras haber delegado el desarrollo de su software en el equipo encargado de crear ColorOS, y de tener un acceso más directo a los recursos de OPPO, la compañía se sacó de la manga el OnePlus 10T, un dispositivo que, aún perteneciendo a una gama inferior a la del 10 Pro, resultaba un producto más atractivo por su relación especificaciones-precio. Y, si bien se arrastraban algunos de los problemas de los años anteriores, algo parecía indicar que OnePlus parecía estar recuperando su esencia.Ahora, en pleno 2023, OnePlus vuelve a adentrarse de lleno en el segmento de la gama alta telefónica con su nuevo flagship para esta primera mitad …