* Por Nicolás de Camino, CEO y Co-Fundador de Xepelin
Es de conocimiento general que muchas veces la competitividad y vorágine del mercado puede poner cuesta arriba las intenciones de surgir y crecer de las empresas; ya sean pequeñas, medianas, e incluso, las más grandes. Sin embargo, y tal como dice el cliché: “La tecnología ha llegado a solucionar la vida de las personas”, y en este caso, y por qué no, de las empresas. La liquidez financiera no siempre viene atada al éxito de una compañía, ya que en más de alguna ocasión hemos sabido, y presenciado, que organizaciones con gran proyección quedan a mitad de camino debido a falta de capital, y porque también sus clientes les pagan a 60, 90, e incluso, 120 días, dejando pocas posibilidades para operar de forma fluída.
¿Y por qué el cliché de la tecnología? Principalmente, porque acá aparecemos las fintech que nos dedicamos a apoyar sueños, emprendedores, facturas, cobros, pagos y empresas, que están en algún apuro financiero debido a la falta de liquidez, y que por motivos que a veces no se entienden, no pueden acceder al crédito o financiamiento tradicional. Es aquí donde nuestro rol se torna protagónico, y nos gusta creer que heroico, ya que con innovación podemos entregar una “justicia financiera”, otorgando herramientas con conciencia que equilibren la balanza y democratizan servicios financieros para que las empresas de todos los tamaños pueden competir en igualdad de condiciones.
Hemos visto entorpecer sueños por la vorágine del mercado, mencionada anteriormente, pero como …