Palm, una de las firmas con más renombre en el mercado móvil de antaño gracias a sus PDAs, ha vuelto al mercado tras varios años de inactividad, y lo hace a lo grande. Paradójicamente, su nuevo lanzamiento es un pequeño dispositivo que va en contra de las tendencias actuales del mercado.
Llamado sencillamente Palm, el dispositivo mide poco menos de 10 centímetros de largo y 5 centímetros de ancho con pantalla de apenas 3.3 pulgadas, pero eso sí, con resolución 720p. Lo que es más interesante aún, es que este pequeño tiene certificación IP68 de resistencia al agua y polvo.
Otras de sus especificaciones son más modestas: chipset Snapdragon 435, 3 GB de RAM, 32 GB de almacenamiento, Android 8.1 Oreo, batería de 800 mAh con carga mediante USB Type-C, cámara trasera de 12 megapixeles y frontal de 8 megapixeles. Su cuerpo es de cristal, con protección Gorilla Glass por ambos lados y marco de aluminio. No hay sensor de huellas, pero para la seguridad Palm ha integrado reconocimiento facial en este pequeño.
¿Complemento perfecto?
El enfoque de Palm es curioso pues con un dispositivo tan pequeño está llamado a ser más bien un complemento de nuestro smartphone principal. De hecho, el Palm no funciona por si solo sino que debe sincronizarse con otro dispositivo, ya sea Android o iOS, y así es como recibirá notificaciones y llamadas.
Si lo vemos de cierta manera, es como el smartphone de emergencia que usamos solo en ocasiones …