Steve Jobs nunca fue conocido por morderse la lengua. Tanto, que muchos empleados preferían no comer con él para no enfrentarse a sus insistentes preguntas. Pero si era así con el personal "de casa", ¿cómo sería con la competencia, verdad? Steve tuvo muchos roces: con directivos de Google, de Adobe... Y, sin embargo, con Bill Gates siempre tuvo una relación de lo más particular.
Fueron (y son) competencia. Hubo acusaciones, pero también, gracias a Bill, Apple consiguió salir de la quiebra. ¿Qué cosas, verdad? Precisamente, en una de esas charlas que tuvieron entre ellos dos, Jobs no se lo pensó lo más mínimo: le dijo al fundador de Microsoft que "debería haber probado ácido". Sí, Steve Jobs estaba convencido de que un viaje con LSD podría haber ayudado a Gates a crear productos más bonitos.
La insólita recomendación de Jobs a Gates
Steve aprendió el valor del diseño desde pequeño. Y es que su padre le mostró siempre la importancia de hacer bien cada trabajo. Más adelante, ya de adulto, Steve hizo varios viajes: a la India... y sí, a otras dimensiones. Steve Jobs reconoció abiertamente que el hecho de haber experimentado con LSD transformó su vida. Llegó a describirlo como "una de las dos o tres cosas más importantes". Para él, fue tan revelador que Bill Gates contó años después en una entrevista que intentó seducirle con la idea. Y como era Steve, la sugerencia no vino sola, sino también con una buena crítica al diseño de los productos …