Sin duda, el olor a lluvia, procedente de varias fuentes diferentes, es uno de los aromas más agradables que existen. Tanto, que incluso ha sido bautizado con nombre propio: petricor.
“¿A qué huelen las nubes?” Así empezaba el anuncio de una famosa marca de compresas, cuyo eslogan taladró nuestra memoria, incrustándose en ella por los siglos de lo… Seguir leyendo...