Recibir un cumplido debería ser una experiencia agradable, pero muchas personas sienten vergüenza o incomodidad en lugar de disfrute. La razón detrás de esta reacción está ligada a la autoestima, las creencias internas y la influencia cultural. Descubre qué nos impide aceptar los elogios con naturalidad y cómo cambiar esta percepción.