Tras 19 tormentas registradas en la cuenca del Atlántico y con todavía más de dos meses para el final de la temporada de los huracanes, es posible que de nuevo nos quedemos sin nombres para distinguirlos por segundo año consecutivo.
Actualmente el huracán Sam se encuentra en las aguas abiertas del Atlántico, que se espera no sea una amenaza para las zonas de tierra. Detrás de él, es posible que en los próximos dos días se formen Víctor y Wanda, dos fenómenos que tampoco representarán una amenaza, pero que si se llegan a formar, agotarían la asignación de nombres oficiales utilizados en la Temporada Nacional de Huracanes para las tormentas tropicales y huracanes.
Como las letras Q, U, X, Y y Z no se utilizan comúnmente y tampoco aparecen en la lista de nombres atlánticos, el año pasado el Centro de Huracanes comenzó a asignarles las letras griegas al excedente de tormentas, situación que solamente se ha dado en dos ocasiones: durante 2005 y en 2020.
El año pasado, estos fenómenos fueron tan violentos, que los nombres de las tormentas Eta e Iota, fueron retirados tras azotar la costa de Nicaragua.
Las letras griegas para los huracanes generaban el impacto equivocado
Incluso antes de que se decidiera eliminar el uso de las letras del alfabeto griego, la comunidad científica ya había externado su preocupación por la naturaleza confusa de estos nombres durante la temporada de huracanes, pues la cobertura hacía más énfasis en señalar que pertenecían a este …