El "Nokia 3310" no ha regresado porque todo lo que supuso en 2000, que no fue poco, no tiene traducción directa a nuestro tiempo. Ni se necesita.
En una época caracterizada por la nostalgia, no hay mejor manera para llenar un nombre vacío en 2017, como "Nokia", que volver no a su producto estrella, sino al año 2000 y al blanco de millones de historias y memes, el Nokia 3310. Pero no sólo fue un nombre y un mero recuerdo. El Nokia 3310 fue mucho más que eso, y en opinión de quien esto escribe, es lo que hoy debería celebrarse más allá de un intento desesperado y sin demasiado sentido. Y de eso va esto, de los motivos por los que triunfó.
El Nokia 3310 se lanzó al mercado en el cuarto trimestre del año 2000. En aquel momento, ya no se podía afirmar que la telefonía móvil estuviera naciendo en España, pues la penetración entre la población llegaba ya más del 50%. No era una cifra elevada, países como Finlandia o Suecia llegaban al 70%. Pero lo importante es que la cifra iba creciendo, con un 80% de esos clientes en modalidad de prepago. Lejos de la saturación actual, las operadoras necesitaban modelos para atraer al público general, lejos ya del empresarial que copó sus carteras de clientes en los primeros años.
Jugar con la nostalgia por jugar es peligroso. La apuesta de Nintendo con la Classic Mini viene cargada de valor. La de Nokia, pese a la actualización, no …