El ascenso del nivel del mar ya no es una advertencia futura, sino una realidad que golpea con fuerza a ciertas naciones. Algunas, como Tuvalu o las Maldivas, podrían simplemente dejar de existir. ¿Qué países están preparándose para el peor de los escenarios? Y lo más inquietante: ¿quién será el próximo?