Lunes, doce y media de la mañana. España entera mira el móvil casi al mismo tiempo. Todo empieza con la caída de la luz, pero muy pronto el apagón eléctrico se convierte también en un apagón de cobertura. La barra de señal del iPhone enloquece: de 5G a 4G, de ahí a 3G, y para muchos, la temida "E" vuelve a surgir. Algunos ni siquiera sabrán qué significa. Los más veteranos en el mundo del iPhone y de los smartphones lo recordaremos bien. Modelos recientes como el iPhone 14, iPhone 15 y iPhone 16 han visto aparecer un icono de satélite. Y así, de golpe, de un minuto a otro, una sociedad hiperconectada se enfrentaba literalmente a la nada. Al cero. Al apagado y fuera de cobertura.
Así cae la cobertura cuando hay un corte de luz
Como casi todo, las infraestructuras de telefonía móvil dependen de la red eléctrica. Y esto afecta tanto a los datos móviles como a las llamadas. Cuando no hay luz, las antenas empiezan a tener problemas. Frente a la falta de electricidad, las antenas preparadas activan sus baterías y generadores de emergencia, pero como ha comentado Vodafone "su funcionamiento depende de la duración de la incidencia". Para optimizar la duración de esas baterías, los operadores suelen deshabilitar las conexiones de datos móviles, permitiendo solo llamadas.
Por eso, aunque durante unos minutos tras el apagón muchos seguíamos viendo 4G o incluso 5G, solo era la antesala de …