Ante el fracaso con crítica y público de Batman vs Superman, Escuadrón suicida y Liga de la justicia, Warner Bros. puso en marcha una estrategia de control de daños para intentar borrar (o cuando menos difuminar) de la memoria colectiva su desatinada ocurrencia de lanzar un improvisado universo de superhéroes para competir ipso facto contra el Marvel Cinematic Universe.
Parte de esa estrategia fue aligerar el tono de las películas venideras y quitarles indicios evidentes de conexión con un universo de filmes, y bajo ese enfoque llegó Aquaman y, ahora, ¡Shazam!, cinta que además de ser la más anómala dentro del catálogo de filmes live-action de DC Comics (sean del DC Extended Universe o de décadas pasadas), sirve como recordatorio de esa visión pura que en la infancia teníamos de la figura del superhéroe.Billy Batson (Asher Angel) es un chico que durante años ha huido de hogares temporales, pues su principal propósito es encontrar a su verdadera madre. Un día cruza caminos con un mago antiguo que le transmite todo su poder, y ahora cada que Billy grita “¡Shazam!” se transforma en un adulto encapotado (Zachary Levi) que tiene toda una gama de superpoderes.
A la par, un hombre se hace de las representaciones demoníacas de los siete pecados capitales y las suelta en nuestro mundo para enfrentarse a Shazam y robarse sus habilidades, lo que provocará una lucha sin cuartel en la que familia y amistad serán la clave para salir victorioso.¡Shazam! es una auténtica curiosidad dentro del catálogo …